El paquete COVID-19 del Congreso incluye inversiones clave contra el hambre, aún se necesitan más
22 de diciembre de 2020
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22 de diciembre de 2020 - Anoche, el Congreso aprobó un proyecto de ley de ayuda COVID-19 bipartidista que hace inversiones críticas en la red de seguridad social. Casi un año desde que comenzaron la catastrófica salud pública y las subsiguientes crisis económica y de hambre, cada vez más personas se han visto empujadas aún más hacia la pobreza y el hambre. En este momento, 1 de cada 4 californianos está experimentando inseguridad alimentaria, con tasas aún mayores de hambre experimentadas por Comunidades negras y latinx.
Junto con nuestros bancos de alimentos miembros, agradecemos a la Portavoz Pelosi, a la Congresista Lofgren y a la Congresista Lee por su compromiso inquebrantable y meses de liderazgo para impulsar inversiones significativas en SNAP y otros programas de alimentos esenciales. También aplaudimos a toda la delegación de California por esta histórica votación bipartidista, así como al congresista Panetta y al congresista Costa por priorizar SNAP y otros apoyos alimentarios en esta legislación necesaria para combatir el impacto de la crisis de múltiples niveles.
Si bien el proyecto de ley de ayuda COVID-19 aprobado anoche reconoce y brinda apoyo a los desafíos inimaginables que enfrentan los estadounidenses en todo el país hoy en día, se espera que esta pandemia tenga impactos económicos y de desempleo a largo plazo que se sentirán durante mucho tiempo.
A continuación se muestra un resumen de los aspectos más destacados, extraídos de un resumen completo publicado por el Senador Stabenow y el Comité Senatorial de Agricultura, Nutrición y Silvicultura.
Beneficios públicos:
Inversiones en alimentos de emergencia:
Si bien estamos increíblemente agradecidos por este proyecto de ley de ayuda, mientras nos acercamos a un nuevo año y un rayo de esperanza brilla con una vacuna, la dura realidad para muchos sigue siendo en gran medida la misma. Estamos en una crisis de hambre en toda regla. Sabemos por la Gran Recesión que el hambre persiste años después de que la economía comienza a recuperarse. El hambre finalmente regresó a los niveles anteriores a la recesión justo antes de que golpeara el COVID-19.
Para mantener a los californianos sanos y nutridos durante todo el proceso de recuperación, continuaremos trabajando con el Congreso para fortalecer nuestra red de seguridad social y nuestros bancos de alimentos permanecerán en primera línea, continuando atendiendo la creciente necesidad de alimentos en nuestras comunidades. Estamos en esto a largo plazo, no meses, sino años.