Declaración de CAFB sobre el presupuesto del presidente

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El presupuesto del presidente propone recortes profundos que empeorarían el hambre, la salud y la economía en California

El presidente Trump publicó ayer su presupuesto para el año fiscal 2019 proponiendo más de $213 mil millones en recortes profundos al Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (conocido como CalFresh en California) durante los próximos diez años, casi un recorte 30% a uno de los programas federales más exitosos del país. El anteproyecto del presupuesto describe una visión dura para nuestro país que aumentaría el hambre y las dificultades para los californianos comunes. La Asociación de Bancos de Alimentos de California insta encarecidamente a todos los miembros de la Delegación del Congreso de California a oponerse a los recortes de SNAP y otros programas vitales que ayudan a sacar a millones de californianos de la pobreza.

SNAP es el programa contra el hambre más importante del país, y llega a más de 4 millones de californianos que padecen inseguridad alimentaria al año. El presupuesto del presidente incluye varias propuestas que socavarían la solidez, la eficiencia y el alcance del programa que conocemos hoy en día. El presupuesto exige reestructurar radicalmente la entrega de beneficios, limitar las opciones y transferir más de $260 mil millones en compras de alimentos del hogar individual a el gobierno en forma de caja de alimentos del USDA. Además, el plan presupuestario recorta los beneficios para casi todos los hogares de SNAP, incluidos los ancianos, las personas con discapacidades y las familias con niños.

La propuesta del presidente también cambiaría la exitosa y eficiente asociación público-privada de SNAP que generó aproximadamente $12 mil millones en actividad económica el año pasado, respaldando mercados para productores y clientes para minoristas locales. SNAP, no la caridad privada, es la primera línea contra el hambre. Los bancos de alimentos conocen la importancia del programa porque 19 de cada 20 comidas de emergencia provienen de la red federal de seguridad nutricional. No hay forma de que los bancos de alimentos puedan compensar recortes de esta escala, lo que aumentaría el hambre y las dificultades en todo el estado.